Una piedra desconocida conquista el mundo.

Una piedra desconocida conquista el mundo.

En 2011 presentamos por primera vez nuestros productos de Shungit en una de las más grandes exposiciones europeas de minerales. Para visitar la exposición “Días de los minerales en Múnich“ llegaron participantes y visitantes de todas las partes del mundo: de India, África del Sur y Alaska. En aquella exposición sólo nosotros presentamos la piedra de Shungit. En aquel entonces las preguntas más frecuentes eran: “¿Qué piedra es esta?“, “¿Para qué es necesaria?“, “¿Es carbón?“, “¿Dónde yace la piedra?“ En aquel entonces la piedra de Shungit fue absolutamente desconocida. Un par de años después la situación se cambió cardinalmente. En los catálogos, libros y claro que en Internet apareció la información detallada sobre Shungit y su uso. A causa de la demanda crecida se ha formado un surtido amplio de diferentes productos de Shungit. Ya en la exposición de Múnich de 2015 aparecieron muchos revendedores que ofrecían la piedra de Shungit en todas las variaciones posibles, desde piedras brutas de diferentes tamaños hasta unas piezas de alta calidad.  

Ahora recibimos peticiones y pedidos prácticamente de todos los países del mundo. Enviamos grava de Shungit a Corea del Sur, un péndulo fue pedido de Moldavia, una mujer de Emiratos compró una pirámide de Shungit.

Los americanos inventaron las tertulias con presentaciones de las mercancías, por eso no nos asombró cuando nuestros clientes de los EEUU nos informaron sobre tales tertulias en forma de presentaciones de Shungit. En proceso de venta de las mercancías entre la gente del grupo tiene lugar un intercambio de información interesante. La gente comparte la experiencia y las ideas, y de tal manera fueron inventados unos productos de Shungit nuevos, innovadores, por ejemplo, las láminas para armonización. Shungit es una piedra especial que simplemente convence. Nada más que unos años después la piedra de Shungit se expandió desde una aldea pequeña en el Norte de Rusia por todo el mundo. Gracias a Internet, a los revendedores y, claro, en primer lugar, a la piedra, en todo el mundo ya existen miles de usuarios de Shungit. En todos los continentes y casi en todos los países del mundo Shungit es conocido y se aprecia gracias a su efecto positivo.